IP: Sin conexión

IP no tiene conexión, lo que significa que no se genera una conexión completa exclusiva antes de enviar los datos. Como se muestra en la figura 1, la comunicación sin conexión es conceptualmente similar a enviarle una carta a alguien sin avisarle al receptor con anterioridad.

Las comunicaciones de datos sin conexión funcionan con el mismo principio. Como se muestra en la figura 2, IP no necesita un intercambio inicial de información de control para establecer una conexión completa para que se reenvíen los paquetes. IP tampoco necesita campos adicionales en el encabezado para mantener una conexión establecida. Este proceso reduce en gran medida la sobrecarga del protocolo IP. Sin embargo, sin una conexión completa preestablecida, los remitentes no saben si los dispositivos de destino están presentes y en funcionamiento cuando envían paquetes, ni tampoco si el destinatario recibe el paquete o si puede acceder al paquete y leerlo.