Pautas generales para la creación de ACL
La composición de ACL puede ser una tarea compleja. Para cada interfaz, puede haber varias políticas necesarias para administrar el tipo de tráfico que tiene permitido ingresar a la interfaz o salir de ella. El router en la ilustración tiene dos interfaces configuradas para IPv4 e IPv6. Si necesitáramos ACL para ambos protocolos, en ambas interfaces y en ambos sentidos, esto requeriría ocho ACL diferentes. Cada interfaz tendría cuatro ACL: dos ACL para IPv4 y dos ACL para IPv6. Para cada protocolo, una ACL es para el tráfico entrante y otra para el tráfico saliente.
Nota: las ACL no deben configurarse en ambos sentidos. La cantidad de ACL y el sentido aplicado a la interfaz dependen de los requisitos que se implementen.
Las siguientes son algunas pautas para el uso de ACL:
- Utilice las ACL en los routers de firewall ubicados entre su red interna y una red externa, como Internet.
- Utilice las ACL en un router ubicado entre dos partes de la red para controlar el tráfico que entra a una parte específica de su red interna o que sale de esta.
- Configure las ACL en los routers de frontera, es decir, los routers ubicados en los límites de las redes. Esto proporciona una separación muy básica de la red externa o entre un área menos controlada y un área más importante de su propia red.
- Configure las ACL para cada protocolo de red configurado en las interfaces del router de frontera.
Reglas para aplicar las ACL
Se puede configurar una ACL por protocolo, por sentido y por interfaz:
- Una ACL por protocolo: para controlar el flujo de tráfico en una interfaz, se debe definir una ACL para cada protocolo habilitado en la interfaz.
- Una ACL por sentido: las ACL controlan el tráfico en una interfaz de a un sentido por vez. Se deben crear dos ACL diferentes para controlar el tráfico entrante y saliente.
- Una ACL por interfaz: las ACL controlan el tráfico para una interfaz, por ejemplo, GigabitEthernet 0/0.