El pilar de computación en la niebla

Los modelos de red describen el flujo de datos de una red. Algunos modelos de red son:

  • Modelo cliente-servidor: (Figura 1) Este es el modelo más común de redes. Los dispositivos cliente solicitan servicios a los servidores.

  • Modelo de computación en la nube: (Figura 2) Este es un modelo más nuevo donde los servidores y los servicios están distribuidos a nivel global en centros de datos distribuidos. La computación en la nube se describe en más detalle más adelante en este capítulo.

  • Computación en la niebla: (Figura 3) Este modelo de red de IoT corresponde a una infraestructura informática distribuida más cercana al perímetro de la red. Permite que los dispositivos perimetrales ejecuten aplicaciones a nivel local y tomen decisiones de inmediato. Esto reduce la carga de datos en las redes, ya que los datos sin procesar no deben enviarse por las conexiones de red. Aumenta la resistencia al permitir que los dispositivos de IoT funcionen cuando se pierden las conexiones de red. También aumenta la seguridad al evitar que los datos sensibles se transporten más allá del perímetro donde se necesitan.

Estos modelos no son mutuamente excluyentes. Los administradores de redes pueden usar cualquier combinación de los tres modelos para satisfacer las necesidades de los usuarios de red. El pilar de computación en la niebla básicamente extiende la conectividad de la nube más cerca del perímetro. Permite que las terminales, como los medidores inteligentes, los sensores industriales, las máquinas robóticas y demás, se conecten a un sistema local integrado de computación, redes y almacenamiento.

Las aplicaciones que usan computación en la niebla pueden monitorear o analizar datos en tiempo real de los dispositivos conectados a la red y luego realizar acciones como cerrar una puerta, cambiar la configuración del equipo, aplicar los frenos de un tren y más. Por ejemplo, un semáforo puede interactuar localmente con varios sensores que detectan la presencia de peatones y ciclistas, y puede medir la distancia y la velocidad de los vehículos que se acercan. El semáforo también interactúa con los semáforos vecinos para proporcionar una acción coordinada. De acuerdo con esta información, el semáforo inteligente envía señales de advertencia a los vehículos que se aproximan y modifica su propio ciclo para prevenir accidentes. Los datos que obtuvo el sistema de semáforos inteligentes se procesan localmente para realizar análisis en tiempo real. La coordinación con los sistemas de semáforos inteligentes vecinos en la niebla permite implementar cualquier modificación en el ciclo. Por ejemplo, permite cambiar la sincronización de los ciclos en respuesta a las condiciones de la carretera o los patrones de tránsito. Los datos de clústeres de sistemas de semáforos inteligentes se envían a la nube para analizar los patrones de tránsito a largo plazo.

Cisco prevé que el 40 % de los datos creados por IoT se procesarán en la niebla para el año 2018.